Cuando era niño, solía jugar mucho con mi Nintendo 64, en especial The Legend of Zelda. Después de ganar el juego, seguí explorando el mundo abierto por muchas horas, creando mis propias historias y aventuras. Los personajes del Zelda me gustaban tanto que quería pasar tanto tiempo en ese mundo como fuera posible. Aunque las mecánicas de mundo abierto fueron las que hicieron que el Zelda se sintiera diferente de otros juegos, fue con los personajes con quienes formé un fuerte lazo (que duró mucho tiempo después de que terminara el juego).
Una de nuestras metas principales en Duolingo es hacer más fácil la forma en que nuestros usuarios pasan tiempo con nuestros productos (porque, siendo realistas, aprender un idioma no es algo que suceda de la noche a la mañana). Una de las formas que determinamos que ayudaría con eso era presentar un elenco de personajes con quienes nuestros usuarios disfruten pasar su tiempo. Sabíamos que este elenco debía ser diverso, divertido y debían complementarse con nuestra mascota verde: Duo, el búho. Por eso pasamos los últimos 18 meses en el diseño de un grupo de personajes que pudiera motivar (y que le encantara) a nuestra comunidad global de usuarios.
La clave es ser peculiares
Al diseñar a nuestros personajes, queríamos que reflejaran las cualidades del producto que estábamos desarrollando. En Duolingo creamos un contenido de aprendizaje sólido, pero siempre agregamos momentos peculiares y entretenidos. Duolingo, como marca, se mueve contínuamente entre lo auténtico y lo descabellado: mostramos situaciones donde aprender un idioma tiene sentido mientras nos aseguramos de que las situaciones sean divertidas. Entonces, si bien podemos enseñar a alguien a ordenar comida en un nuevo idioma, la magia está en lo que sucede después de ordenar.
¿Cómo puede un grupo de personajes cumplir con estas dos necesidades? Exploramos todo tipo de soluciones de diseño. Aunque tener vikingos y alienígenas como personajes era interesante, se sentían muy alejados de la realidad del aprendizaje de idiomas. Entonces, decidimos que debían ser humanos modernos, pero con personalidades muy peculiares. Dado que los idiomas no son solamente globales, sino que están fuertemente arraigados en la cultura, teníamos la responsabilidad de resaltar esas culturas. En especial, queríamos mostrar aquellas culturas subrepresentadas en los medios occidentales. Había que tener en cuenta muchas cosas para que los usuarios se sintieran identificados con las luchas y afectos de los personajes, todo mientras reflejaban el estilo peculiar de Duolingo.
Quizás estés pensando “esto es muy diferente de su mascota, que no es para nada un humano”... ¡y tienes razón! Nos hicimos otra pregunta: ¿cómo puede vivir un elenco multicultural de personajes en el mismo mundo que un búho verde? La conexión se apoyó en nuestro diseño visual.
Todos los caminos conducen a Duo
Duo es el aspecto visual más importante de nuestra marca. Para poder crear personajes que funcionen dentro de nuestro diseño existente, sabíamos que debían parecerse a Duo, quien tiene cuatro componentes clave. Está constituido de una forma muy simple: tiene una forma muy geométrica y es básicamente un cuerpo con alas. También tiene dos adorables ojos, un cuerpo con una forma única y dos pies desconectados del cuerpo. Cuando observamos todos estos componentes y los aplicamos a un personaje humano, empieza a verse algo interesante: un personaje humano que refleja el diseño de Duo que hace que se sienta parte del mismo mundo.
¡No creas que tuvimos éxito a la primera! Pasamos por una enorme cantidad de diseños, asistimos a talleres, eliminamos diseños, visitamos a profesionales de la industria, hicimos más diseños y finalmente, después de un año y medio, desarrollamos un grupo de personajes que nos gustaban a todos.
¡A implementar la motivación!
Si los personajes iban a tener un impacto significativo, tendrían que aparecer en los lugares en los que los usuarios pasaban la mayor parte del tiempo. Por eso, añadimos a los personajes en la mayoría de nuestros ejercicios, “diciendo en voz alta” la oración que el usuario debía traducir. Pero, no nos detuvimos ahí: con la ayuda de nuestro equipo de animación, dimos a cada personaje una animación única que los usuarios verían cada vez que respondieran correctamente un ejercicio.
Llevamos la idea más allá y desarrollamos lo que llamamos animación de mitad de lección. Estas son básicamente secuencias animadas que puede ver el usuario como recompensa al responder correctamente una cantidad de ejercicios seguidos.
¡Eso es todo por hoy! Hay un brillante futuro para nuestros personajes y las muchas otras nuevas ideas en las que está trabajando nuestro equipo. Mi deseo es que los personajes ofrezcan más posibilidades al desarrollo de nuestro fantástico producto, que ayuden a los usuarios a alcanzar más metas de idiomas y… ¿quién sabe? Que se conviertan en algo que nuestros usuarios amen de verdad. Yo sé que yo lo hago.